lunes, 26 de abril de 2010



Para conocer un poquito más de Barcelona, lea el texto de la brasileña de Vanessa Spada:

Cultura, sol del verano y mucha diversión. Así es Barcelona. Quien viene por primera vez se entusiasma. Y quien ya la conoce, siempre quiere volver. Durante el día el sol se encarga de dar energía a toda la gente. Y por la noche la ciudad transmite una alegría que se contagia.
La noche barcelonesa está llena de vida. Los numerosos restaurantes, bares y discotecas te ofrecen la oportunidad de disfrutar de cada minuto de tu estancia en la ciudad. Además, hay sitios para todos los gustos y bolsillos.
La arquitectura es una de las cosas que más llama la atención. Quien está acostumbrado a convivir entre rascacielos, se sorprende. La mayoría de los edificios no tienen más de 8 plantas. Menos la torre Agbar, un edificio futurista distinto a los existentes en la ciudad, y también las torres gemelas, en la Barceloneta.

Llena de contrastes, Barcelona es una ciudad cosmopolita y con mucho movimiento. La comunicación y la cultura también forman parte de la vida de las personas. Si te gusta mirar y ser observado, no dudes en ir a las playas de la ciudad, ya que el sol brilla hasta las diez de la noche.
Como ya sabes, en el Mar Mediterráneo puedes encontrar otras playas como las de la Costa Brava o las de la Costa Dorada o si lo prefieres visitar los diversos pueblos tranquilos de la montaña. Y en invierno también puedes esquiar o practicar otros deportes en el norte, en los Pirineos.
Los medios de transportes dentro de Barcelona, hablamos de metros y de autobuses, son limpios y muy rápidos. Se pueden coger en cualquier sitio y pasear por toda la ciudad con ellos. Los trenes regionales también son una buena opción, principalmente para conocer las playas que están fuera de Barcelona. Sitges, por ejemplo, a 30 minutos, es una de las la playas más famosas y visitadas. -

Cada día se pueden hacer actividades diferentes. Ya sea por el día o por la noche. Durante el verano, las fuentes de Montjuic son una atracción que no debes perderte, un espectáculo de luces y sonidos espectacular. El Barrio Gótico, el Tibidabo, las ramblas, el estadio del F.C.Barcelona, el Museo Picasso, el Pueblo Español, el Puerto Viejo, la Sagrada Familia y muchas otras cosas son sólo un pequeño ejemplo de una ciudad que respira historia y que además no ha tenido miedo en innovar. Por ejemplo, a raíz de los Juegos Olímpicos de 1992 fueron construidas nuevas infraestructuras para recibir visitantes y así abrir las puertas de Barcelona al extranjero. En éste cambio se incluyen las playas de la ciudad, que bien se puede decir que antes no existían.

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